0 comentarios Empezar en el gimnasio (II)

A continuación te ofrecemos nuevos consejos para empezar en el gimnasio.

¿CUÁL ES TU OBJETIVO?

Mis músculos están flácidos

No tienes sobrepeso pero notas que a tu cuerpo le falta firmeza, tus músculos están blandos y quieres darles tono. También puede ser el caso contrario: necesitas subir de peso porque estás demasiado delgado o simplemente quieres un cuerpo más fuerte. Puede ser por una cuestión estética (volumen y/o definición muscular) o por una cuestión funcional (tener más fuerza).

Te recomendamos: actividades en las que predomina el trabajo muscular, pero no descuides el entrenamiento cardiovascular, base de todo lo demás.

Actividades: Pesas, GAP (Glúteos, Abdominales, Piernas), Body Pump, Spinning, TBC (Total Body Conditioning), Aquagym.

Tengo sobrepeso...

La báscula no miente. Llevas tiempo sin cuidarte y unos kilos de más han aprovechado para colonizar tus caderas, tus piernas, etc. Necesitas adelgazar y el gimnasio es el mejor sitio al que puedes acudir. Tendrás asesoramiento profesional y el factor motivación-interacción a favor: es más fácil hacer deporte con más gente y si te obligas a cumplir un horario.

Te recomendamos: actividades en las que predomine el ejercicio cardiovascular, aunque una rutina de tonificación te ayudará a mantener el peso controlado. Déjate asesorar porque aunque te encante el body pump, puede que para ti sea más recomendable que vayas antes un par de meses a mantenimiento para ganar algo de forma física.

Actividades: Spinning, Aeróbic, Cardiotonic, GAP, TaeBo, Body Pump.

Estoy con mucho estrés

Los deportes de combate permiten liberar tensiones, pero si prefieres relajarte el gimnasio te ofrece también opciones interesantes.

Te recomendamos: La zona agua del gimnasio ofrece muchas posibilidades. Tampoco olvides las actividades de origen oriental con tendencias relajantes, aunque puedes descargar tensiones igualmente con actividades de mucho movimiento.

Actividades: Stretching, Yoga, Tai Chi, Pilates, Sauna, Box, Kick Boxing y escalada en muro.

Quiero más rendimiento

Estás en forma y de vez en cuando hasta corres alguna carrera, o estás en un equipo de fútbol, pero te has estancado y quieres aumentar tu rendimiento.

Te recomendamos: Pide que te preparen un plan específico con los ejercicios que necesitas para mejorar. Un instructor analizará los movimientos de tu deporte y te dirá qué cargas, qué ejercicios realizar y cómo tienes que ejecutarlos.

Actividades: Entrenamiento personalizado, pesas, TBC, Spinning, Body pump.

Necesito un cambio de vida

Tienes una existencia sedentaria y empiezas a plantearte el hecho de que vas a necesitar tu cuerpo durante toda tu vida. Quieres hacer ejercicio para mejorar tu salud, pero no sabes cómo empezar. Ya lo intentaste por tu cuenta yendo a correr al parque de enfrente, pero duraste sólo una semana.

¿Te pueden ayudar en un gimnasio? Sí. Además te aconsejarán con los ejercicios más apropiados y vas a encontrar una motivación extra.

Te recomendamos: Prácticamente todas las actividades de un centro deportivo resultan recomendables.

Actividades: Mantenimiento, pesas, baile, Aquagym, Pilates, Tae bo, Yoga.

Lo que debes saber

■ Después de una sesión de trabajo intenso de pesas deja al menos 48 horas para que el grupo muscular se recupere.

■ Recuerda que la cinta de correr no se detiene por que quieras bajarte. Cuando veas que no puedes seguir reduce poco a poco la velocidad. Como se te ocurra parar de golpe vas a salir disparado.

■ Los estiramientos tienen que hacerse siempre al finalizar tu sesión de ejercicio, no antes de comenzarla. Los movimientos forzados en frío pueden dañar un músculo o una articulación por falta de lubricación y elasticidad.

■ Nunca te vayas del gimnasio sin estirar antes. Así prevendrás lesiones y suavizarás el típico dolor del día siguiente. Y, pese a que proteste tu cuerpo, un día después es mejor hacer media hora de deporte suave que quedarse en casa.

■ Los rebotes déjalos para el baloncesto. Estirar es una maniobra suave y progresiva en la que no hay balanceos ni rebotes de ningún tipo. En otra época era diferente, pero no olvides que los tiempos cambian y los estudios han corroborado lo negativo de ese primitivo método.

■ Cuando hagas abdominales trata de evitar que se forme hueco en la zona lumbar. Piensa en la seguridad de tu espalda que puede lesionarse si no se adopta la mejor posición y flexiona las rodillas lo suficiente como para que toda la espalda toque el suelo o el banco de abdominales.

■ Dúchate siempre en el gimnasio para no enfriarte de regreso a casa. Acaba con agua fría paraactivar la circulación y acelerar la recuperación muscular.

■ Una sauna después de entrenar relaja mucho y ayuda a recuperarte, pero antes debes consultar a tu médico si te conviene.

¿Tomaste nota?

Ya habrás notado que ninguno de estos consejos es complicado de aplicar y te facilitarán mucho tu primera jornada en un nuevo gimnasio. Pero seguro que surgen situaciones que nosotros no hemos tenido en cuenta.

No te preocupes. Lo importante es que actúes con naturalidad y preguntes todo lo necesario. No tengas miedo al ridículo, todos hemos sido nuevos alguna vez y seguro que el personal del gimnasio, e incluso tus compañeros, lo van a entender perfectamente.