0 comentarios Errores nutricionales: Espinacas, alimentos light, vitaminas, colesterol y leche

1. Las espinacas tienen mucho hierro y te pondrán fuerte

Realmente las espinacas tienen hierro, pero Popeye podría haberse puesto igual de fuerte con otros alimentos que contienen incluso más hierro. Un ejemplo son las lentejas, que comparadas con las espinacas tienen más del doble de hierro: espinacas -  3 mg por 100 g, lentejas - 7 mg por 100 g.

Podemos recomendar también otros alimentos como por ejemplo el alga dulce con 150 mg por 100 g, o el wakame con 40 mg por 100 g. Si no eres vegetariano, el hígado de cerdo por ejemplo nos aporta 20 mg por cada 100 mg, y los berberechos aportan 22 mg por cada 100 g.

Con lo visto hasta el momento hemos de decir que si te gustan las espinacas puedes seguir tomándolas, porque además te aportarán sustancias laxantes y sustancias que facilitan la absorción del hierro por tu cuerpo. Pero tienes otras opciones para añadir hierro a tu dieta que incluso son más rentables.

2. Los suplementos de vitaminas engordan

Es completamente falso. Las vitaminas nos son nutrientes, no suponen ningún aporte de energía para el cuerpo, y por lo tanto, no pueden engordar en absoluto. Por otro lado, son indispensables para nuestro cuerpo, ya que intervienen en numerosas reacciones y funciones de nuestro organismo e intervienen en el funcionamiento de todos nuestros sistemas. Debemos asegurarnos de no tener carencia de ninguna de ellas.

3. ¿Es malo el colesterol?

Realmente lo hemos convertido en el malo de la película. La sociedad en general lo rechaza directamente. Pero la realidad es que necesitamos el colesterol para vivir. El colesterol es un tipo de grasa del que se forman los ácidos biliares, las hormonas sexuales, los corticoides, la vitamina D, etc. Un porcentaje del 85% lo fabrica el hígado de manera natural.

El problema para nuestro organismo surge cuando aumentan las lipoproteínas de baja densidad o LDL, que se encargan de transportar el colesterol a las células, y en ese camino entre el hígado y los órganos, se puede acumular en las paredes de los vasos sanguíneos, endurecerse y provocar problemas cardiovasculares graves.

Lo que realmente provoca los problemas derivados o achacados al colesterol es la ingesta excesiva de carnes rojas, huevos, lácteos, etc. Y esto puede provocarnos problemas cardiovasculares a medio o largo plazo.

4. Los alimentos light adelgazan

En principio no todos los alimentos que nos venden como productos light nos aportan 0 calorías. Es posible que simplemente sean productos con un alto aporte de calorías, pero que se las reducen. Realmente si nos gustan este tipo de productos es mejor tomarlos light que tomarlos con todas sus calorías.

Aunque mi recomendación es comer verduras, ensaladas, frutas o alimentos asados, porque aún sin ser light, nos aportarán muchas menos calorías que los light. Cuidado también con los alimentos que nos dicen que llevan 0 calorías, pueden llevar un exceso de conservantes, edulcorantes artificiales, y por tanto, no son nada recomendables para una dieta sana.

5. ¿Debemos tomar leche todos los días?

Aunque en la cultura popular está arraigada la creencia de que la leche es necesaria para nuestra dieta diaria, es posible que algunas personas con la edad pierdan la enzima lactasa, sin la cual la absorción de la leche por nuestro organismo se hace más difícil.

Por otro lado sí es cierto que el calcio es mineral clave para múltiples procesos metabólicos, por ejemplo, forma parte de los huesos, dientes y tendones, interviene en la contracción muscular, ritmo cardiaco y la coagulación sanguínea. Es tan importante que cuando el cuerpo detecta que los niveles en sangre no son los adecuados lo extrae de los huesos.

Pero la realidad es que existen otros alimentos que contienen más calcio que la leche: el alga hiziki aporta 1.400 mg de calcio frente a los 120 mg que aporta la leche de vaca. El sésamo nos aporta 783 mg, las sardinas en aceite 400 mg, el chocolate con leche 240 mg, las almendras 234 mg, la soja 200 mg y el pulpo 144 mg.

Como puedes ver tienes otros alimentos que puedes utilizar para mantener equilibrada tu ingesta de calcio. Aunque si toleras la leche, un vaso de leche caliente antes de dormir  es muy recomendable incluso para conciliar el sueño.