Aunque aún faltan unos meses para el verano, no debemos olvidar la importancia de una zona media fuerte, tanto para culturistas, como para deportistas en general.
Todos sabemos que una de las partes que más destaca en un buen físico son los abdominales. Todos queremos tenerlos fuertes y marcados. Para ello no podemos limitarnos a los clásicos encogimientos. Debemos fortalecer toda la zona globalmente, debemos hacerlo así porque si te falta equilibrio entre todos los distintos grupos musculares de tu sección media (abdominales, oblicuos, espalda baja, glúteos y caderas) no vas a conseguir los efectos de entrenamiento que buscas por más encogimientos que hagas.
Asegúrate de trabajar todos los músculos de tu sección media.
Al trabajar la cintura, muchas personas tienden a descuidar los glúteos y las caderas porque no ven la conexión que existe entre esos dos grandes grupos musculares y los abdominales que pretende desarrollar.
Esta colección de ejercicios se ha diseñado teniendo en cuenta ese equilibrio.
RUTINA DE ABDOMINALES EN CIRCUITO
-Tres veces por semana
-Repetimos el circuito 3 veces
-No importa el orden
-Descansamos 15 seg. entre ejercicios
-Realizamos repeticiones hasta el fallo
PLANCHA LATERAL
Colocaos en la posición que muestra la foto, apoyando el antebrazo y el pie. El codo debe quedar directamente debajo del hombro, y la cadera no debe dejarse caer. Aguantad la posición durante 30-60 segundos.
GIROS ALTERNOS DE CINTURA, CODO A RODILLA CONTRARIA
Acostados sobre la espalda con los pies separados a la anchura de las caderas y las manos colocadas detrás de la cabeza, doblad la rodilla en dirección al torso y luego doblad la cintura de forma que el codo derecho se acerque a la rodilla izquierda. Aguantad un instante la posición, elevad la pierna derecha unos 15 centímetros del suelo, y luego subidla y bajadla hasta este punto para hacer 10 a 30 repeticiones.
ENCOGIMIENTO DE PELVIS
Acostados boca arriba sobre una colchoneta con las palmas hacia abajo equilibrando el ejercicio. Flexionamos las caderas y las rodillas 90 grados. Levantamos las caderas del suelo y realiza una rotación de pelvis hacia el interior. Nos detenemos un momento en la posición más alta, y luego bajamos lentamente las piernas hasta que los talones toquen casi el suelo.